2008-12-29

Animaniacs legislativos

¿50 millones de pillos?

Resulta que el legislador priísta Mario López Valdez cree que lo somos, y no sólo cree que lo somos sino que quiere nuestras huellas digitales y a menos que (dudosamente) la ley sea vetada por el ejecutivo, tendremos que poner nuestras huellas digitales, domicilio y otros datos adicionales que nos harán perfectamente identificables frente a los pillos de verdad que no cobran dietas.

Más grave aún es que tras del oligofrénico López fueron 88 legisladores más que no lograron conectar la neurona de guardia con la neurona funcional y votaron a favor de la iniciativa.

Lean esta joyita:

En México para el 2007 se pronosticó un total de más de 59 millones de líneas celulares, ése es el número de posibles armas a disposición de la delincuencia. Las compañías telefónicas no sólo lesionan la economía de los usuarios con tarifas tan altas, también ponen la tecnología al servicio de la delincuencia como un vehículo de agresión a la sociedad, y sin control alguno por parte del Estado, de los nombres y domicilios de los dueños o usuarios.

¿En que otra cabeza excepto la de un legislador cabe equiparar un celular a un arma? ¿Requeriremos en el futuro de un permiso de portación de celular -y el proporcionar datos lo es?

En serio, hay pendejadas sin límite en nuestro país surrealista.

Si al menos se hubiesen molestado en darse una vuelta por Google, verían que cualquier hijo de vecina puede descargar software de clonado de celulares, de manera que hasta un senador puede "fabricar" un número de serie de celular. Pero ¿Para que estudiar si ya son senadores? y lo que realmente agotan es el trasero en tan agotadoras sesiones legislativas.

Ciertamente el celular proporciona un gran anonimato y una movilidad extraordinara. Parte de las medidas de la legislación (obligar a los proveedores de servicio a proporcionar localización y deshabilitar efectivamente un teléfono robado) son muy razonables, sin embargo la "lógica" del registro ciudadano equivale a "fichar" a priori a los ciudadanos sin que medie delito previo. Bajo esa misma lógica algún otro idiota podrá proponer que nos encarcelen a todos y nos vayan sacando de la cárcel por eliminación.

¿Cuáles son las consecuencias de esta nueva ley idiota?

  • Los (miles) de establecimientos que venden equipos celulares tendrán acceso irrestricto a información personal, huellas digitales incluidas, de todos los usuarios de celular. Y además una correlación con el poder adquisitivo -no es lo mismo comprar los sobrantes de el modelo de hace 3 años que el último chirrido de la moda. Y el vendedor será conocedor además del tipo de pago que se haga (efectivo, crédito), de manera que al menos un criminal tendrá potencialmente a bajo costo información financiera y personal correlacionada, ahorrémosle trabajo.
  • ¡Más robos de celulares! Desde luego. ¿Han tratado de reportar un celular robado? Al menos Telcel tiene una atención terrible -horas en el teléfono si no es en horario de oficina, o dejarlo todo para ir a una oficina de atención de Telcel, mientras que en las horas intermedias ya le pudieron dar "buen" uso al teléfono robado. De manera móvil, desde luego, para evitar que el provedor lo localice.
  • Una mejora tecnológica en cuanto a clonación, desbloqueo y actividades anexas. Al menos esto contribuirá a generar trabajos para electrónicos y programadores que actualmente viven de taxistas, ambulantes y taqueros.
  • Guardar cuidadosamente los chips viejos, usándolos de vez en vez para que no pierdan vigencia. Los chips que circulan actualmente serán una maravillosa fuente de ingresos.
  • Mayor uso de teléfonos públicos y de telefonía IP con el proveedor basado en Rusia o China -previo pago anónimo en Paypal, claro. Y desde un cibercafé para que la policía tenga chivo expiatorio.
  • Más autocomplacencia de los legisladores mexicanos, que de repente tienen una fiebre legislativa maniaco-compulsiva que los obliga a aventar iniciativas a lo pendejo sobre cualquier tema en una creciente demagogia. Y esto es más peligroso que los secuestros virtuales, ya que ésta es una ley que efectivamente nos secuestra.

¿Que tal si trabajaran? ¿Sería México un mejor país? Esperemos -lo cual dudo- que el ejecutivo tenga al menos un dedo de frente y vete otra ley idiota y onanista.
El problema es que, desde luego, nos seguimos dejando.



2008-12-16

Más del CAT


La semana pasada escribía sobre el CAT (Costo anual total) que es una ecuación que permite calcular como los bancos nos roban cobran intereses.
Alguien tuvo a bien dejar una liga a su propio blog, bastante informativo pero al menos inexacto al decir que el "CAT es posible calcularlo sin demasiadas complicaciones".
Falso. El señor que lo publica es maestro en administración y probablemente le parezca fácil calcularlo. He aquí la divertidísima manera en que se calcula... señores, les presento al CAT, con una simpleza que permite que Juan Pueblo calcule que tanto le deberá al banco al final del j-esimo período tras de haber hecho su k-ésimo pago ¿O era la j-ésima disposición? En fin, claro como el agua y todo en las finanzas:

Donde... ¿En serio vale la pena explicarlo? Aplíquese mejor su dosis de crack y metanfetaminas, haga una licenciatura fuertemente apoyada en matemáticas (no menos de alguna ingeniería, por favor) y vaya al sitio del Banco de México donde tienen la explicación completa. Que igual que Condusef y su "información" le servirá de pura chingada nada.
No, no es nada fácil calcularlo. Es fácil que alguien te lo calcule... para el caso el mismo banco.
El siguiente es un breve diálogo con un gran amigo mío que vive en USA:

Gerardo: Zaz, me acaba de llegar mi estado de cuenta de una de las tarjetas.
Alejandro: ¿Y que tal?
Gerardo: 7.65%
Alejandro: ¡No está nada mal!
Gerardo: ¿Mensual?
Alejandro: ¡No mames! Acá un interés del 30% es de escándalo y eso en plena crisis.

Y eso sin contar la linda práctica de la usura anatoicismo, que consiste en el cobro de intereses sobre intereses.

Más sobre la usura bancaria cuando me pase el berrinche.


¡Esto es Espartaaaaa México!


2008-12-04

Diseños idiotas.

Por alguna razón, todo mundo se siente con la obligación de reinventar de tanto en tanto la interfaz de usuario. Algunos "reinventos" pueden ser agradablemente exitosos como lo fue MacOS, Windows95 (tanto que a Microsoft tuvo que ponerle un sistema operativo de verdad en 2000 y traje de payaso en XP). Lograron rehacer la IU en Vista y en un montón de aplicaciones sueltas como el Messenger, Office y demás, donde las cosas dejan de funcionar como estás acostumbrado ("¿Donde quedó el menú de Archivo"?) y la posterior necesidad de un reentrenamiento en las aplicaciones.

Curiosamente -aparte del soporte- desde que existen interfaces gráficas de Linux se han dado discusiones religiosas a nivel de jihad sobre si había que imitar a MSFT o hacer algo propio, y la propuesta de imitar era para que hubiese suaves transiciones de los usuarios desde el entorno Windows a GNOME o KDE.
Bien, pero además está la web, animal con vida propia que existe en cada navegador y que desgraciadamente no está sujeta a un diseño pensado y consistente como pueden ser los entornos gráficos de sistemas operativos -que incluso tienen guías de estilo para el diseño.
Per una vez dentro del navegador, pareciera que todo mundo desea que su aplicación web sea "linda" y de preferencia costosa para cobrarla bien al cliente, para hacer feliz al personal de relaciones públicas e imágen y para saturar las pupilas con colorcitos y funciones pirotécnicas completas. Lástima que tanto "Eye Candy" parece terminar generando "Eye Diabetes".

Va el ejemplo anecdótico:
Ayer, como cualquier ciudadano del mundo se me ocurrió preocuparme por mi (enorme) deuda en tarjetas de crédito ante lo que viene en el corto plazo, así que decidí visitar ese chistoso acrónimo de "Comisión Nacional Para la Protección y Defensa del Usuario de Servicios Financieros" (Joder, si desde el nombre es rimbombante ¿Que esperar de su sitio web?).

A modo de disgresión:
Mi malsana intención era ver cual era la tarjeta de crédito con el menor costo anual total para intentar renegociar mi deuda de Banamex "D'Super" que amenaza con comerse a mis nietos primogénitos, además de todo lo demás.
Que de todas maneras se los va a comer, ya sea como ofrenda a los dioses del dinero, como cautivos del sistema fiscal que pagará la deuda impagable a los bancos que en México ya maman de la teta fiscal, que en USA ahora hacen lo mismo, y que pronto volverán a "rescatar" en México.
Fin de disgresión. Mejor sigo con el tema y escribo de los rescates después.

Finalmente, tras una navegación casi de monkey tester, di con la página de marras, donde esperanzadamente quería ver el CAT de todas las tarjetas de todos los bancos. Oh, decepción. Me encontré esto:


Ni modo. A seguir buscando. Y me encontré esto otro:





Bien: para comenzar tengo más tarjetas que las que reportan allí (y conste que me falta un buen de bancos), todas con CATs diferentes aún siendo del mismo banco. De manera que su "información" sirvió para dos cosas: para nada y para pura chingada fregada.

Con la esperanza de que hubiese más información busqué que hubiese un indicador de siguiente página (el típico >>) pero no. Hasta que por mera casualidad pasé el cursor por la esquina superior derecha y ¡La página comenzó a doblarse, oh yeah, que fancy, que bonito, que cool!
Claro que hay que arrastrar el cursor hasta la linea de cosido para que la página de la vuelta y pueda ver que... no hay más información relevante.

Supongo que el diseñador se siente realizado casi en la misma proporción que yo descepcionado.
Si bien flash es una preciosa herramienta, si lo que se desea es información accesible y clara, esta paginita es una perla de lo que no se debe hacer.

Lo bueno es que si fue licitado, alguien ya ganó una lana.